Cuarenta años después, México tiene amplias posibilidades para volver ser anfitrión en una Copa del Mundo. Aunque a diferencia de la que organizó en 1986 no lo hará en solitario, sino junto a Canadá y Estados Unidos.
Así lo confirmó el presidente de la Concacaf, Victor Montagliani, quien reveló que los tres países están trabajando una propuesta conjunta que habrá de presentar a la FIFA para poder albergar el Mundial de 2026, el primero que se llevará a acabo bajo el nuevo formato de 48 selecciones.
“Canadá, Estados Unidos y México apuntan a una propuesta compartida, es una idea que ha existido por un tiempo, las discusiones continúan y es una propuesta muy emocionante si llega a buen término”, dijo Montagliani en una entrevista para el diario inglés The Guardian.
“Solo hemos tenido comentarios positivos al respecto y es una señal muy fuerte de lo que el fútbol puede hacer para unir a los países”, agregó en la víspera de la congreso anual de la Concacaf que tendrá lugar en los próximos días en la isla caribeña de Aruba.
El diario asegura que “la propuesta conjunta de Concacaf se considera la primera favorita para acoger el torneo”, dado que el último Mundial que fue concedido a Concacaf fue el de Estados Unidos 1994, y la idea para FIFA resulta sumamente atractiva para marcar el cambio de formato aprobado este año, ampliando los cupos de de 32 a selecciones participantes.
“La decisión final podrá tomarse a finales de este año y podremos presentarla dentro de los tiempos que se han marcado”, aseguró Montagli.
El pasado mes de marzo, el presidente de FIFA, Giani Infantino, señaló que si Estados Unidos no cambiaba parte e sus políticas de migración y no garantizaba el acceso al país a jugadores, entrenadores, árbitros y aficionados no podría organizar la justa.
Al respecto, Montagli confió que la propuesta conjunta entre México, Canadá y Estados Unidos, puede “superar” todo tipo de regímenes políticos y ayudar a que el deporte tenga mayor credibilidad.
La FIFA tiene previsto evaluar la viabilidad de las propuestas a partir de enero de 2019 y hasta febrero de 2020. La decisión final se tomará en el congreso de la FIFA en mayo de 2020.