La Premier League está de luto. Y es que este viernes falleció Bradley Lowery, un pequeño aficionado al Sunderland inglés que conmocionó al mundo del futbol por su emotiva relación con el futbolista Jermaine Defoe.

Lowery padecía de neruoblastma, un cáncer infantil de carácter degenerativo que desafortunadamente acabó con su vida a los seis años de edad.

La relación entre Defoe y Lowery fue de fantasía. Su ídolo se convirtió en su mejor amigo y juntos vivieron momentos incomparables dentro y fuera de la cancha de futbol.

Este martes, a sabiendas de que le quedaban pocos días por el empeoramiento de su enfermedad, el delantero inglés asistió a su fiesta de cumpleaños, y posteriormente, con lágrimas en los ojos, habló de lo que Lowery ha significado para él.

“Hace unos días estuvo con él y fue difícil verlo sufrir de esa manera. Siempre estará en mi corazón durante el resto de mi vida. No pasa ni un día sin que me levante y mire mi teléfono o piense en Bradley. Veo que su amor es genuino, lo veo en sus ojos cuando me mira”, comentó.

Una de las historias más emotivas del futbol terminó este día, pero la relación entre Lowery y Defoe es un ejemplo de la magia que tiene un balón y la inspiración que un ídolo puede tener en cualquier aficionado.