Puebla corre el riesgo de perder una de sus más emblemáticas actividades milenarias que es la fabricación de vasijas y otros productos de Talavera por dos factores esenciales, uno de ellos tiene que ver con el poco conocimiento e interés de las personas en dedicarse a este arte.

Pero el otro, es por la pelea que se ha desatado con el vecino estado de Tlaxcala, que busca ganar la denominación de origen de este oficio tradicional y que hoy representa un patrimonio inmaterial de Puebla.

Así lo dio a conocer German Gutiérrez Herrera, representante de Casa Celia, conformada por las marcas de Talavera Celia, Museo Interactivo y Celia´s Café, quien en conferencia de prensa hizo un llamado a la preservación y crecimiento de este oficio milenario.

“Sin más preámbulo queremos que a través de ustedes los medios de comunicación, es urgente que la sociedad poblana se entere de el riesgo de que la Talavera Poblana desaparezca, ésta cerámica milenaria, que es una de las más bellas caras de nuestra ciudad y de nuestro estado, la que da brillo y arte a una gran cantidad de fachadas y cúpulas, la misma que es parte del Patrimonio Cultural intangible de la Humanidad”.

Como uno de los principales representantes de los fabricantes de productos de Talavera, cuyo negocio de los más sólidos por ahora en el estado explicó que la situación para los artesanos poblanos de este ramo, en lo particular, se ha visto afectado por la falta de gente que se dedique a esta actividad histórica, es por ello que dijo: “Estamos convocando a las y los poblanos, a la sociedad en su conjunto, a que evitemos que la talavera poblana desaparezca y esperemos que se sumen al esfuerzo de preservar esta parte esencial de la cultura de Puebla, convirtiéndose en fabricantes”, expresó.

Gutiérrez Herrera explicó que la talavera en Puebla puede desaparecer porque tan sólo basta hacer número y recordó que en el siglo XVIII existían alrededor de 60 talleres de Talavera en una población de 54 mil 573 Poblanos.

Pero hoy en día, dijo, existen solamente nueve talleres, en una población de seis millones 583 mil 278 Poblanos, por lo que resulta más que obvia su situación en vías de extinción, porque no tenemos a nadie a quien heredar nuestros conocimientos y amor por este arte y eso es preocupante”, expresó con un profundo pesar.

La ignorancia ha sido uno de los principales elementos que amenazan con desaparecer la talavera en el estado, ya que muchas personas hoy en día, sobre todo los jóvenes, consideran que esa artesanía es muy “cara” sin conocer de fondo las características que lleva la talavera para denominarse como tal.

La falta de interés en ella, es otro de los factores que también intervienen en lo que parece ser un camino sin retorno e inevitable, poque mencionó el dueño de Talavera Celia, es que ya no hay a quien más heredar esta bello e histórico oficio, por la falta de interés y la ignorancia de las nuevas generaciones.

Ya no hay quienes vean lo hermoso del proceso de hacer vasijas de talavera, donde los siete colores empleados en su elaboración son: el azul, amarillo, negro, verde, naranja y malva, y donde cada pieza es única, echa a mano, como los propios alebrijes, mientras que el vidriado que la caracteriza contiene plomo y estaño, como ha sido elaborada en Puebla desde la época virreinal.