Tras ser cuestionado sobre la despenalización de éste en el estado de Oaxaca y su intento por permitirlo en Puebla, el prelado dijo que no sólo es pensar en que este tipo de temas recaiga en 41 diputados, sino debe caer en la conciencia de quienes practican el aborto en nuestro país.
Por eso reiteró que por mucho que esto caiga en manos de unos cuantos, el aborto no dejará de ser un crimen.
Por otra parte reprobó la manera en cómo grupo de feministas se expresan ante estas medidas, pero recordó que, hoy en día, la sociedad está polarizada y hay mucho descontento ante temas como la violencia o el aborto y así expresan su desacuerdo.