Se llevó a cabo el único debate organizado por el Instituto Nacional Electoral (INE), entre los candidatos al gobierno de Puebla, Luis Miguel Barbosa, de la coalición conformada por Morena, PT y PVEM; Alberto Jiménez Merino, abanderado del PRI; y Enrique Cárdenas, candidato común del PAN, PRD y MC.
En el Complejo Cultural Universitario de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP), los aspirantes realizaron propuestas en tres ejes temáticos: Empleo y Desarrollo Regional; Atención a Comunidades Indígenas y Migrantes; Seguridad, Federación y Estado de Derecho.
Los candidatos coincidieron en trabajar con la sociedad para recuperar la seguridad del estado e impulsar un desarrollo equilibrado regional con inversión, salud, educación, servicios eficientes y obra pública.
Durante el encuentro, Miguel Barbosa y Enrique Cárdenas se descalificaron con presuntos actos de corrupción y enriquecimiento ilícito.
“Enrique Cárdenas es un candidato flojo, que no hizo campaña, que se quedó con el dinero de la campaña, que ha defraudado al fisco, que ha defraudado al CONACYT. Se volvió un vividor de los presupuestos del estado en materia de investigación y cultura. (…) Hay que trabajar todos unidos en Puebla con el propósito de alcanzar la reconciliación. Tenemos que borrar esa distancia que hay entre sociedad y poder público, generada por los malos gobiernos del PRI y el PAN”, sostuvo Barbosa.
Agregó que su proyecto de gobierno garantizará que la gente tenga las posibilidades de tener empleo, ingreso, seguridad, estudios y todas las condiciones para vivir “en un estado de felicidad”. Subrayó que impulsa un programa para 21 regiones del estado donde se apoyará todas las actividades productivas; tanto el campo, el comercio y la industria.
Al respecto, Enrique Cárdenas rechazó las acusaciones, y dijo que su proyecto de gobierno está centrado en construir más y mejor infraestructura para conectar al estado, entre otros.
“Tenemos dos Pueblas: una moderna e industrializada y la otra rezagada, abandonada. Necesitamos hacer una sola Puebla para todos (…) Tenemos todo para crecer, sólo nos falta un gobierno honesto. Solo un gobernador incorruptible puede tener policías incorruptibles”, expresó.
Reconoció que el principal reclamo de la gente es terminar con la inseguridad, por ello propuso un gobierno que sepa resolver problemas y que sea honesto, más y mejores policías, acercar la justicia al ciudadano e impulsar la defensa de los derechos humanos de todos los poblanos.
Por su parte, Jiménez Merino aseguró que como gobernador gestionará los recursos suficientes para enfrentar la inseguridad de Puebla, se coordinará con la Guardia Nacional y nombrará al Secretario de Seguridad a un mando militar que no esté en activo para combatir la impunidad.
“Una vez electo Gobernador, buscaré al presidente de la República para gestionar los recursos y el apoyo para garantizar las condiciones de seguridad para Puebla. Aplicaré el convenio del nuevo Sistema de Justicia Penal con visión intercultural, se creará la Fiscalía para Pueblos indígenas, ministerios públicos con personal que hable lenguas maternas y fortalecer los juzgados indígenas. (…) Fortaleceré las zonas donde hay más delincuencia con inversión, fomentaremos la producción para rescatar el campo, el turismo y toda actividad potencial que tiene Puebla”, apuntó.
