El candidato del PRI a la gubernatura, Alberto Jiménez Merino, señaló que no hay pruebas de que el Gobierno Estatal esté interviniendo en el proceso electoral extraordinario, y confió en que los servidores públicos se mantendrán al margen para evitar problemas que ocurrieron en los comicios pasados.
"Sigo confiando en el Gobierno, en el gobernador Guillermo Pacheco Pulido, conocedor y respetuoso del derecho, no tenemos evidencias de que haya alguna intervención, si la hubiera, por supuesto que sería lamentable y la estaremos combatiendo conforme a la ley", declaró.
El abanderado del partido tricolor afirmó que se necesita erradicar la corrupción que tanto han afectado a la entidad y la mantienen en un estado de polarización, por lo que el PRI se mantendrá vigilante para tener un proceso limpio y de lo contrario demandará castigo con cárcel para quienes cometan fraude electoral, tal como prometió el presidente de la Republica, Andrés Manuel López Obrador.
Lo anterior luego de que los senadores Alejandro Armenta y Nancy de la Sierra han acusado sin fundamento al Secretario General de Gobierno, Fernando Manzanilla de intervenir en la selección de candidato de Morena y de que los dirigentes estatales del PAN, PRD y Movimiento Ciudadano demandaron al gobierno del estado sacar las manos del proceso durante el arranque de campaña de su candidato, Enrique Cárdenas.