Quinto Poder
El 13 de mayo, el Instituto Nacional Electoral (INE) emitió una orden que obligó a Lilly Téllez a suspender su participación en el programa de Ciro Gómez Leyva en Radio Fórmula. La medida se tomó debido a las aspiraciones políticas de Téllez, quien busca un escaño en la Cámara de Senadores en las elecciones de 2024.
Después de su inesperada salida de Radio Fórmula, Lilly Téllez dirigió su furia hacia el consejero del INE, Arturo Castillo, a quien acusó en sus redes sociales, específicamente en su cuenta de X (Twitter), de ser el responsable de prohibirle continuar en el programa. La candidata de la oposición denunció públicamente lo que consideró un acto de censura, condenando sin pruebas y llegando incluso a exhibir el número de teléfono de Castillo, a quien calificó de "servirl a Changoleon (Gerardo Fernández Noroña)".
Sin embargo, la reacción de Jorge Álvarez Máynez, quien salió en defensa del consejero Arturo Castillo, desencadenó una confrontación directa entre ambos. Álvarez Máynez, en un acto que algunos interpretaron como indirectas, expuso a Téllez como el "verdadero rostro de la oposición", desatando así una tormenta de acusaciones y descalificaciones.
En un momento explosivo, Lilly Téllez respondió a las críticas de Álvarez Máynez calificándolo de burro y borracho por reprobar su tuit anterior. La candidata, lejos de retroceder, defendió su acción argumentando que el número telefónico del consejero electoral es de dominio público, por lo que no violó ninguna norma de privacidad. "No sea burro candidato @AlvarezMaynez o espere a estar sobrio para tuitear (...) Si bebe, no escriba en X", fueron las palabras incendiarias de Téllez.
La cuenta de la candidata Lilly Téllez en X, fue bloqueada temporalmente
La contienda en las redes sociales alcanzó un nuevo nivel cuando la cuenta de Lilly Téllez en X fue bloqueada temporalmente por la misma plataforma. La candidata a senadora envió un comunicado al reconocido periodista Joaquín López-Dóriga, quien confirmó que la cuenta de Téllez había sido bloqueada después de que usuarios la denunciaran por divulgar el número de teléfono del consejero del INE.
Ante esta situación, Téllez se defendió argumentando que la información que compartió era pública y accesible para cualquiera, refutando así las acusaciones de violación de privacidad. A pesar del bloqueo inicial, la cuenta de Lilly Téllez fue restaurada unas horas más tarde después de que logró demostrar que no había infringido ninguna normativa sobre privacidad.
La confrontación entre Lilly Téllez y Jorge Álvarez Máynez no solo ha generado un intenso debate en las redes sociales, sino que también ha puesto de manifiesto las tensiones políticas y la polarización que prevalece en el panorama político mexicano. Mientras tanto, el eco de esta disputa sigue resonando en la esfera pública, dejando interrogantes sobre el papel de las redes sociales en el ámbito político y la ética en la comunicación digital.
