El temor a un nuevo derrumbe del Cerro del Chiquihuite, en Tlalnepantla, Estado de México, hizo que cientos de vecinos de la colonia Lázaro Cárdenas desalojaran de madrugada sus casas para buscar un lugar seguro.

El desalojo ocurrió 4 horas después de que fueron suspendidos los trabajos de rescate, muy cerca del sitio donde se registró el derrumbe del pasado viernes.

“¿Estamos hablando de 100 vecinos?… No, más, ya son una, dos, tres, cuatro manzanas las que ahorita están alerta. Imagínate son estas dos cuadras todo hacia arriba”, dijo Miguel, vecino de la colonia Lázaro Cárdenas.

Ricardo de la Cruz Musalem, subsecretario general de Gobierno estatal, precisó que ayer ingenieros y especialistas del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), confirmaron que aún se veían grietas en algunas caras de la ladera, valoración corroborada por especialistas particulares, personal del Colegio de Ingenieros y el gobierno mexiquense.

Agregó que a sugerencia de los expertos, se determinó notificar casa por casa la situación de riesgo prevaleciente y hacer la evacuación preventiva, a fin de continuar con la evaluación y considerar la posibilidad de ingresar maquinaria para estabilizar el área y reducir el riesgo. Dijo que el área de desalojo de casas se ampliaría si así lo determinan los ingenieros y técnicos.

Solo algunos de los vecinos que desalojaron sus casas se trasladaron a los albergues, la mayoría se fue a casa de familiares o amigos.

A las 4 de la mañana elementos de la Guardia Nacional (GN) llegaron al lugar y en coordinación con Protección Civil inspeccionaron la zona para determinar si existía o no otra situación de riesgo.

Con información de Carlos Guerrero, La Jornada y Expansión Política