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Enrique Dussel Peters, coordinador del Centro de Estudios China-México, profesor del posgrado de Economía de la UNAM, destacó que la estrategia de “securityshoring”, relacionados con seguridad y migración, adoptada por Estados Unidos se ha convertido en el concepto supremo en su relación comercial con China, planteado por el presidente electo Donald Trump y que México no debería replicar automáticamente este enfoque.

“Copiar y pegar el ‘security shoring‘ de Estados Unidos en contra de China me parece una perspectiva poco sensata”.

En entrevista para Aristegui en Vivo, Dussel Peters enfatizó que la relación triangular entre México, Estados Unidos y China requiere un equilibrio complejo desde la visión mexicana.

“No se trata de una discusión de Estados Unidos o China, sino desde una perspectiva mexicana, se trata de Estados Unidos y China”, y afirmó que, aunque China es el segundo socio comercial de México desde 2003, la estrategia nacional no ha estado a la altura de los retos que plantea esta relación.

El especialista recordó que China es el segundo socio comercial de México desde 2003, pero destacó que el 70% de las importaciones mexicanas de origen chino son realizadas principalmente por empresas extranjeras establecidas en el país, incluidas muchas estadounidenses.

Por ello, argumentó que medidas como el aumento de aranceles anunciado por el expresidente Donald Trump podrían impactar también a estas compañías.

“No es suficiente decir México 25% de arancel, sino que esto afectaría sobre todo a empresas estadounidenses y extranjeras en general”.

El académico señaló la importancia de una agenda estratégica explícita para enfrentar las presiones provenientes tanto de Estados Unidos como de China.

“El documento ‘Aspectos para una Agenda Estratégica México-China: las nuevas relaciones triangulares’, elaborado por expertos como Eugenio Anguiano y Liliana Arzovska, incluye 27 propuestas concretas para fortalecer la relación bilateral y triangular”, explicó Dussel Peters.

Este documento, de acceso gratuito, apuntó, busca sentar las bases para una reflexión profunda sobre las relaciones internacionales de México.

Asimismo, destacó que la relación entre México y China no es nueva, ya que cuenta con más de 50 años de diplomacia formal; sin embargo, advirtió que las instituciones bilaterales necesitan ser modernizadas.

“Es imperante realizar una evaluación, un monitoreo. Hay aspectos que han salido bien, pero otros son totalmente insuficientes“, añadió.

Dussel Peters también criticó las recientes acciones del gobierno mexicano, como los aranceles a textiles y otros productos provenientes de China, calificándolas como una reacción insuficiente ante la complejidad de la relación trilateral.

“Con el argumento de actividades ilegales en el centro histórico, se ha cerrado dos veces el mismo edificio. Si aplicáramos el mismo criterio, tendríamos que cerrar docenas de cuadras”.

El experto concluyó que México debe asumir un papel proactivo en esta dinámica global y no ceder automáticamente a las presiones de Estados Unidos o China.

“Si no hacemos esto, me temo que caeremos en una situación de enorme debilidad”, concluyó.