Si hay un político desprestigiado y catalogado como un ser corrupto, ese es el diputado José Juan Espinosa, huérfano de los Moreno Valle.
Mil historias se han escrito sobre este cínico sujeto, de quien vale la pena que explique de dónde sacó tanto dinero para comprar un rancho en el municipio de Calpan, con caballos, rodeó y venados.
También que diga cómo le hizo para poner un cementerio en ese lugar; construir un colegio, salón de fiestas y cabañas en Atlixco; una casa de lujo en El Cristo de Atlixco; una plaza comercial en San Pedro Cholula y una llantera entre otras cosas.
El hoy diputado y ex alcalde de San Pedro Cholula no quiere decir de dónde obtuvo tantos millones, pero yo si lo diré: de las extorsiones que hacía a contratistas y proveedores de su gobierno, de las prerrogativas de los partidos de donde fue presidente y de los chantajes y extorsiones que sabe hacer muy bien.
Pues bien: hoy el corrupto pide que se investigue la corrupción.
Ojalá también pida que investiguen a su mujer, hijos, padres y hermanos a los que les ha puesto propiedades a su nombre para ocultarlas.
Que el JJ no nos engañe que su padre tenía dinero, no. La llantera hace años era un verdadero changarro y el terreno en donde estaba (hoy plaza comercial), era un muladar.
Incluso si madre trabajaba de secretaria para ahorrarse un salario.
El corrupto JJ se está vacunando para evadir la cárcel, porque con todos los delitos que acumula, por menos recibiría en los EU cadena perpetua.