De confirmarse que desde el interior del equipo de Andrés Manuel López Obrador ordenan a sus huestes en Puebla desafiar y burlarse de las autoridades, temo que los mexicanos viviremos un modelo político inquisidor.
Y si López Obrador no sabe, le esconden o manipulan que sus legisladores han cometido diversos delitos, por este medio se lo comento.
Y es que el mismo AMLO debe entender que sus aliados han cometido todo tipo de salvajismo violento para tratar de apoderarse de una elección que no les pertenece.
En Puebla hubo voto diferenciado y el hoy candidato derrotado ha comenzado a perder el temple.
Ayer retó a las autoridades, se burló de ellas y las ninguneó. Todo porque su presidente de partido filtró que hay órdenes de aprehensión en contra de 9 militantes que encabezaron actos delincuenciales y que el mismo Barbosa solapa.
Los de Morena han comenzado a perder la cabeza porque la FEPADE no les ha dado la razón y su camino más fácil es la violencia para apoderarse lo que no ganaron por la buena.
Y ayer filtraron que el mismo AMLO dijo que no reconocía la elección en Puebla.
De ser cierto, lástima para los 125 millones de mexicanos cuya mayoría no votó por AMLO.