Luego de que se aprobara la ley donde médicos pueden rechazar la consulta a diferente personas entre ellas homosexuales, indígenas y migrantes, las diferencia y desigualdad continúa en Nuevo León. Familiares de un estudiantes de secuendaria 12 Miguel Granados Chapa, acusaron la expulsión del niño por parte de directora con el motivo de que el estudiante vive con su tío quien mantiene una pareja del su mismo sexo.
Para hacer posible dicha expulsión se mantuvo que el niño pateo una botella la cual estuvo apunto de pegarle aun compañero.
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"El tío podría volver gay a su sobrino" declaró la directora de la secundaría.
De acuerdo a información de medios de comunicación, la familia ha presentado una denuncia en la Comisión Estatal de Derechos Humanos.