Se trata del edificio que colapsó totalmente durante el sismo del pasado 19 de septiembre. Los otros dos inmuebles de la institución educativa y el resto del predio no fueron intervenidos debido a la situación jurídica que los guarda.

Pese a que se tenía previsto realizar dichas labores en ocho semanas, la planeación de labores y el trabajo del personal permitieron realizarlas en 17 días, destacó la dependencia.

En seguimiento a la instrucción de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) capitalina se retiraron las losas y el escombro de la estructura que colapsó totalmente, debido a que presentaba un riesgo para los inmuebles colindantes y sus habitantes.

La Sobse detalló que para garantizar la seguridad de las edificaciones aledañas el proceso de demolición fue mixto.

Tras el retirar el cascajo y recorrer el tapial para confinar el predio, la Sobse concluyó su participación en la propiedad que quedó bajo resguardo de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) capitalina.

Durante la demolición estuvieron presentes peritos supervisando las actividades, al igual que representantes del Ministerio Público, para interceder oportunamente ante cualquier descubrimiento que pudiera ayudar a la investigación.

La Sobse informó que, de forma paralela a la demolición, un grupo de topógrafos fue desplegado en la zona para monitorear al comportamiento de los inmuebles aledaños sin que se registraran desplomes ni hundimientos durante los trabajos.

Con esta demolición la Secretaría de Obras y Servicios suma 63 derribos controlados de edificaciones con daño estructural, mitigando el riesgo que representaban para los inmuebles aledaños y para los peatones y automovilistas que transitan por estos puntos.