Una serie de solicitudes de información mostraron que en 2016, la Secretaría de Salud (SSa) fue, de todas las dependencias federales, la que más gastó en mensajes publicitarios, al erogar mil 465 millones 579 mil 341 pesos. Le siguió el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), con 543 millones 798 mil 483 pesos, mientras que el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) gastó 15 millones 933 mil 645 pesos.
Para el colectivo Red de Acceso, conformado por 16 organizaciones civiles del sector salud, el problema no es la publicidad –ya que ésta tiene funciones específicas para la población en el sector salud–. El problema es que el dinero no se está utilizando como debería de cara a los recortes presupuestales.
Con base en solicitudes de información –realizadas por Red de Acceso– se logró documentar que, de 2014 a 2016, el presupuesto del Ramo 12 “Salud” ha disminuido 46 mil 642 millones 627 mil 141 pesos.
En entrevista con SinEmbargo, el coordinador de la Red, Luis Adrián Quiroz Castillo, criticó que en México ya pasaron por lo menos dos años desde que se realizó la última campaña de concientización y prevención del VIH, por ejemplo. Pero, del otro lado, los rostros del titular de la Secretaría de Salud federal, José Narro Robles; del director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Mikel Arriola Andoni, y del director general del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), José Reyes Baeza Terrazas, son los que abundan en los comerciales pagados por estas instituciones.
De acuerdo con datos obtenidos por este diario digital, las campañas que estas instituciones emprendieron en 2016 fueron: “Seguro para estudiantes”, “Chécate, mídete, muévete”, “Cuarto Informe de Gobierno”, “Reduciendo tiempos de espera con buen trato”, “IMSS digital”, “Prevención del Zika” en tres etapas, “Prevención de embarazos no planeados en adolescentes” y “Gobierno digital”.
Todo este escenario muestra las prioridades de las autoridades, destacó Quiroz Castillo. Cuestionado sobre la última reducción presupuestal para 2017, Narro Robles dijo que el recorte se debía entender por la situación difícil en que se encuentran las finanzas públicas.
Mientras tanto, en los hospitales, la gente está desesperada. El recorte se ve reflejado a diario en la atención que se le brinda a la población, pero el problema se agudiza para las personas que padecen enfermedades catalogadas como catastróficas.
Y ahora, frente a la discusión del Paquete Económico de 2018, año de elecciones, lo que la Red busca es que desde el Congreso se fije un tope mínimo presupuestal de 135 mil millones de pesos para el Ramo 12, que inicie una recuperación del monto y que como el presupuesto de Educación, quede blindado ante reducciones.
