Las medidas de solución al problema migratorio acentuado con la llegada del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no sólo corresponde a los gobiernos, sino también a los ciudadanos, de tal modo que la iglesia solicitó a los habitantes apoyar a las personas que puedan regresar al país y en especial a Puebla.
Monseñor Felipe Pozos Lorenzini, detalló que la iglesia observa con rechazo y dolor la construcción del muro en Estados Unidos, por lo que pidió a las autoridades construir puentes de diálogo y protección para los dos millones de poblanos que residen en el vecino país.
“No le dejemos el paquete al gobierno, tenemos que ser solidarios, y hago un llamado para que abramos el corazón para recibir a los migrantes. Pedimos a la autoridad diálogo y busque acuerdos para construir caminos justos que salvaguarden la dignidad de las personas. Son 2 millones de poblanos, necesitamos respeto no sólo para los poblanos y católicos, sino para todos los hermanos sin importar nacionalidad, porque estos hermanos han dejado riqueza cultural y riqueza para Estados Unidos”, dijo.
Invitó respetuosamente a los gobiernos a una reflexión profunda para garantizar seguridad y activación de empleo a los más pobres y vulnerables.
“El Papa nos ha pedido construir puentes entre personas y romper los muros de la explotación y exclusión. Cada persona migrante es un hijo de Dios, Jesús ha sido migrante, el Papa lo dijo: soy migrantes de padres Europeos, Dios mismo fue migrante”, refirió.
Al final, lamentó la política del presidente de Estados Unidos esperando que las autoridades hagan lo propio para apoyar a los connacionales e implementar medidas necesarias para la protección de las familias.