"Es un clásico, pero hay una nueva generación que no la conoce, entonces lo harán con la versión mexicana", comentó García, ganador en festivales internacionales de cine como Cartagena, Gijón y Montreal.

El remake será producido por Sony México, afirmó el director y agregó que se respetará la esencia de la película, aunque con personajes treintañeros, mayores a los de la entrega original, según El Universal.

El elenco aún está por definir, sin embargo, Guadalajara y la Ciudad de México serán las locaciones para contar la historia de una joven que hará hasta lo imposible por impedir la boda de su mejor amigo, de quien está enamorada.

La adaptación corre a cargo de Gabriel Ripstein ("Compadres" y "Amor a primera vista") y Emiliano Viilanueva ("Hidalgo, la historia jamás contada") será el director de fotografía.

Considera García que no debe ser mal visto realizar el remake de un éxito hollywoodense: "Es contar una historia de calidad sin importar el país, es hacer algo que conecte con la gente y trascienda más allá de las dos horas (en cine). Es una película que cuando la pasan los domingos se sienta uno a verla, ha envejecido bien y ese es el reto de esta", aseguró el director.

En 1997, La boda de mi mejor amigo recaudó 299 millones de dólares, contra 38 millones usados en rodaje.