El popular director de clásicos como Pulp Fiction y Kill Bill conversó con el canal Yellow King Film Boy, en donde expuso las razones por las que es detractor del servicio, con lo que dejó de manifiesto que, en efecto, no todos aman a Netflix.
“Es muy triste para mí, y estoy un poco sorprendido por lo rápido que sucedió, cómo el público avanzó sin mirar atrás, y a nadie le importa”, expuso Tarantino. “No lo digo sólo por nostalgia y no tengo Netflix, así que ni siquiera puedo decir cómo funciona”.
Para el también director de Bastardos sin gloria, tener tantas películas a disposición en Netflix y plataformas similares ha restado el interés por mirarlas de verdad.
“Quizá ves algo por 10 o 20 minutos, te pones a hacer otra cosa y dices: ‘No, realmente no me interesa’. Eso es en lo que hemos caído”, enfatizó.
Tarantino, quien obtuvo su formación cinematográfica en una tienda de videos, en vez de una escuela de cine, menciona que esos establecimientos eran un ritual esencial en la apreciación de una cinta.
“Hay una cualidad diferente con las tiendas de video. Ibas, veías, tomabas una caja, leías el reverso y elegías”, recuenta el reconocido cineasta. “Quizá hablabas con el dependiente de la tienda y te recomendaba algo”.
Ir a una tienda como Blockbuster y rentar un filme implicaba no sólo una inversión de tiempo, sino de dinero, por lo que se hacía una elección consciente.
“Había un poco más de compromiso con lo que acababas rentando. Le dabas una oportunidad a algo y lo rentabas, así que hacías el intento de verlo. Y eso es lo que se ha perdido en verdad. De una forma extraña, lo que se perdió es el compromiso”.
Las de Tarantino no serían las primeras críticas hacia Netflix en lo que va de 2017. La compañía fue objeto de controversia en la primera mitad del año, gracias a su participación en el Festival de Cannes con Okja, del director Bong Joon-ho.