Saltillo, Coah.- Después de haber ganado un Grammy a los 17 años y convertirse en la primera cantante neozelandesa más joven en alzarse con dicho reconocimiento, (y la tercera a nivel internacional), Lorde no tenía prisa por lanzar su segundo material discográfico, el cual llega cuatro años después de Pure Heroine y se titula Melodrama, que hoy se estrena en las plataformas digitales de todo el mundo.
“El disco ha llevado mucho tiempo. Puedo confirmar lo que otros dicen sobre el segundo álbum: que es realmente difícil. Nunca antes había hecho algo en lo que tuviera que trabajar tan duro y pelear por cada una de las decisiones. En ocasiones llegué a pensar que no lo terminaría, pero me decía: ‘cuando esté listo, será fantástico porque me lo habré merecido’. Fue mucha presión de mi parte, pero ahora me siento satisfecha”, confesó la intérprete a la agencia alemana de prensa.
Sin duda fue un arduo trabajo para la joven de 20 años quien ya ha confesado en entrevistas anteriores que es demasiado crítica consigo misma y con su trabajo, esto se debe a que ella es la única persona que sabe realmente de lo que es capaz y por eso se exige más. Además este disco contiene mucho de sus sentimientos, algo que muchos artistas no se atreven a hacer en toda su carrera.
“Me gusta contar la verdad de mí misma. Para mí, es liberador e importante. Así me dibujo un pequeño mapa de mí misma, que con cada verso se vuelve más claro. Mis canciones son tan personales que no las podría cantar nadie más, y eso me parece fantástico. Por otro lado, resulta raro hablar de manera tan sincera y abierta sobre tu propia vida. Es extraño ver como trabajo el hablar de los secretos más íntimos”, explicó Lorde.
De igual manera el segundo álbum de estudio de la cantautora representa el inicio de una etapa, ya que dejó atrás la adolescencia dando así un paso hacia su edad adulta.
“Tengo la sensación de haber escrito mi tesis doctoral sobre lo que significa ser adolescente. Me impliqué mucho con esta edad y al final siento que he cambiado. Antes tenía la adolescencia en un altar y me preguntaba si anhelaba esta época sólo por el hecho de dejarla atrás.
“Actualmente me siento de maravilla, feliz, es fantástico ser un ‘adulto recién estrenado’, lo disfruto y me parece la mejor etapa”, detalló.