¡México está en bancarrota!
Estas declaraciones de Andrés Manuel López Obrador, hicieron que el sector empresarial saliera a la defensa, pues aseguraron debe el ahora presidente electo generar un ambiente de “confianza” para las inversiones, tanto nacionales como extranjeras.
Pese a la gran deuda pública que tiene México que asciende a 10 billones de pesos, los empresarios mexicanos, pidieron al gobierno ser un impulsor para no perder la confianza de que puedan fluir las inversiones.
La defensa es que México crece, aunque sea al 2%.
¿Será suficiente para completar las promesas de campaña?
Ni el mismo Obrador lo sabe. Lo que hasta ahora si tiene como realidad es que no habrá un cumplimiento al cien por ciento de las promesas de campaña y si lo llegara a hacer, tendría que trabajar al país a marchas forzadas.
Cada día que pasa, es un golpe duro para el gobierno lopez-obradorista que, sin perder la esperanza, confía en rescatar al país en los próximos seis años.