El cobro de fotomultas se inició en la administración de Rafael Moreno Valle en el 2013, con el fin de detectar a automovilistas que rebasaran los límites de velocidad en las principales vialidades de la capital poblana y sus municipios conurbados, esto a través del programa Monitor Vial. Los recursos recaudados se iban a destinar a la reparación de las mismas vialidades.

Hay que recalcar que este programa causó molestia en muchos automovilistas quienes buscaron emplacar sus vehículos en estados vecinos.

Hasta julio pasado, el gobierno del estado había reportado que había logrado recaudar 582 millones 992 mil 574 pesos por las fotomultas, recursos de los que no se ha informado cuál fue su destino.

El pasado lunes el gobernador Miguel Barbosa Huerta señaló que el contrato con la empresa Autotraffic encargada de operar el programa estaba por expirar esta semana y que estaban analizando en su administración si se renovaría o no dicho contrato.

Las cámaras de la Vía Atlixcáyotl a la altura del centro comercial Angelópolis una se encuentra tapada con un cartón y la otra solo está la cubierta sin contener ninguna cámara en su interior.

Otras de las cámaras ubicadas en la misma vialidad, o en la Recta a Cholula, el bulevar del Niño Poblano y la avenida de Las Torres, al parecer si tienen cámaras en su interior, pero se desconoce si aún funcionan.