“Ese inmueble si está muy dañado y se lo hemos externado a la comunidad, que iniciaremos los trabajos en 2019 y se terminarían hasta 2020, debido a que los detalles son muy grandes y la reconstrucción tiene que seguir un proceso histórico para que no pierda valor, ya que es un inmueble del siglo XVI”, dijo.
El funcionario federal recordó que existe una inversión extranjera, con la cual se están reparando las pintaras del interior del convento, ya que son con pinturas especiales y a detalle con imágenes antiguas que se tienen en archivos, “esta inversión es buena, sin embargo, en la parte del templo se realizan los análisis y estudios obligados para su reparación”.
Reconoció que ante las lluvias intensas que se presentaron se retrasaron los trabajos y dañaron algunos puntos afectados con las filtraciones.